Ser romántico, ¡no es ser cursi! Acabemos con estos prejuicios. El romanticismo es ternura y dulzura, pero también pasión y la búsqueda de la belleza en todo lo que nos rodea. Y estos 50 dormitorios, de romanticismo, saben latín.
Tonos suaves que invitan a relajarse, detalles que suman encanto a la decoración, la delicadeza de las flores… Estos dormitorios se saben todos los trucos para sumar romanticismo y conquistar a sus dueños noche tras noche.
Camas con dosel, blanco con tonos empolvados, cálida madera clara, piezas vintage, un encantador chandelier colgando en medio de la habitación, estructuras de cama de hierro forjado… Estos son algunos de los elementos que consiguen sacar la vena más romántica en el dormitorio.
No hay comentarios:
Publicar un comentario