Revista el mueble
Dulce, femenino, luminoso, personal, delicado, romántico, vintage... Con estos calificativos, ¿quién se resiste al estilo shabby chic? Descubre sus claves y déjate cautivar
Acabado desgastado Shabby chic significa literalmente desgastado y sofisticado, de ahí que las piezas clásicas con evidentes marcas del paso del tiempo sean un icono de este estilo. La mesa, con acabado envejecido, es de Velafusta. La cómoda es una pieza antigua pintada en blanco por la propietaria del estudio Meles Must.
Atmósfera romántica Una de las claras diferencias de este estilo con el vintage es el halo romántico y femenino de las decoraciones shabby chic. Colores suaves, motivos florales, ramos, muebles de líneas redondeadas... El papel pintado de este dormitorio es de Laura Ashley.
En blancoSi hay un color que domina en el estilo shabby chic es el blanco, sobre todo en las piezas de mobiliario, como demuestra este comedor, tan acogedor como romántico.
We want liberty!Y no hablamos solo de libertad, sino que nos referimos a los estampados de florecillas que se hicieron famosos bajo este nombre y se han convertido también en un símbolo del estilo shabby chic además del look cottage inglés.
Los colores más dulcesLos tonos pastel son un clásico de este estilo decorativo, sobre todo en los textiles de los dormitorio: desde el rosa empolvado y el verde minthasta los azules más suaves.
Elegancia clásicaTan importante es que una pieza sea antigua como que lo parezca. De ahí que los muebles contemporáneos, como este banco o el espejo de marco rococó, pero que reproducen diseños clásicos, tengan cabida en el este estilo decorativo.
Flores a tutiplén Al natural o estampadas en textiles, vajillas o papeles pintados, las flores son un must de este estilo decorativo, en el que lo femenino y lo romántico van de la mano. Este sofá, de herencia, se ha retapizado con una tela de Gastón y Daniela.
De forjaLos muebles de forja en blanco, de aire romántico, combinan a la perfección con piezas de madera y detalles metálicos retro, como el panel de acabado envejecido.
Mezcla de estilosPiezas antiguas o de diseño clásico, como la butaca en capitoné, con otras de líneas rectas más contemporáneas, como la librería. Esta es una de la características del estilo shabby chic.
Un conjunto muy shabby chicEs el que forman el escritorio, una pieza singular recuperada, la colección de jarrones de cristal, el arreglo floral y el cuadro, que enmarca dos hojas de un libro antiguo de arquitectura con representaciones de diferentes tipos de molduras.
Detalles elegantesUnos candeleros antiguos o envejecidos, unos marcos de fotos labrados, una composición de láminas retro... Los pequeños detalles cuentan, y mucho, para una perfecta puesta en escena shabby chic.
Toques de dorado Los espejos con marcos victorianos, labrados o con toques de dorado, como este, aportan un plus de glamour a un estilo que, de por sí, ya se caracteriza por su elegancia. Espejo, a la venta en Federica&Co.
Vajilla retroDesde platos hasta juegos de café o té, la mezcla de un estilo clásico y elegante, pero con un look antiguo, es uno de los imprescindibles de toda decoración shabby chic. Alacena, en Federica&Co.
Piezas recuperadasDar una nueva oportunidad a piezas "viejas" o que han caído en desuso, como este aparador que procede de Estudio Restauración, es una de las claves del estilo shabby chic, que aúna este tipo de piezas recuperadas con otras más actuales, como en este caso, las sillas de fibras.
En la campiña inglesa Bastan unos muebles de jardín de metal en blanco y un mantel y detalles floreados (cuanto más pequeñitas sean las flores, mejor) para conseguir un exterior de lo más shabby chic. El zinc, como el del cubo a modo de maceta sobre la mesa, es otra de las claves de este look.
Modernizando el estiloAunque el color favorito para la madera en el estilo shabby chic es el blanco (además de algunos azules) puedes utilizar otros como el gris para darle un aire más moderno.
'Shabbychiquízalo' tú mismo Si tienes curiosidad por el mundo de los muebles y la restauración, o ya eres un experto en la materia, nada mejor que dar tú mismo el acabado shabby chic a una pieza recuperada o antigua pintándolo con efecto decapado. Existen muchas pinturas especiales para este acabado.
Ni vintage, ni clásico, ni campestre. Sino un poco de todo pasado por el cedazo del romanticismo. Y es que si bien el estilo shabby chic nace en la época de las grandes casas de campo británicas, esta tendencia apuesta por darle a las piezas de decoración clásicas o antiguas un look más sofisticado (de ahí el calificativo de chic), dulce y femenino. Pero, ¿qué caracteriza este estilo decorativo?
Muebles y materiales: la belleza de la imperfección
Las piezas clásicas, de líneas redondeadas y suaves, no pueden faltar en este estilo decorativo. Butacas tipo bergère, banquetas afrancesadas, mesas de comedor de aire provenzal... Y siempre con acabado desgastado o con las imperfecciones propias del paso de los años. Pero no todo son piezas clásicas, sino que uno de los atractivos de este estilo es la mezcla con muebles actuales, creando decoraciones personales y con mucho encanto. En definitiva, vividas.
En cuanto a los materiales, la madera y el hierro forjado son los dos caballos de batalla del estilo shabby chic. Sobre todo en blanco y acabado envejecido, desgastado o decapado.
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