Uno de nuestros mayores retos es el de conseguir una decoración perfecta para nuestro hogar. Ésta tiene que combinar nuestro gusto personal con un diseño agradable a la vista. Para ello hay muchas opciones, pero nos centraremos en el estilo Kilim, una opción muy recomendable para dar color de una manera sutil a las estancias de tu hogar.
Colores étnicos
El estilo Kilim te permite combinar todo tipo de colores de una manera muy natural. Además, puedes optar entre colores más vivos y más mates, por lo que seguro que encontrarás la manera de adaptarlo al tono que quieras darle a la estancia en concreto.
Obviamente, el punto fuerte del estilo Kilim son sus acabados étnicos y la variedad en su estilo y texturas. De este modo, podremos optar por diseños persas, turcos o afganos, cada uno de ellos elaborado con una lana diferente. Esto implica encontrarnos con elementos decorativos más mullidos o más rígidos, pero siempre con algo que nos acabe convenciendo.
Cambio y calidez
Otra de las ventajas del estilo Kilim está en la facilidad que ofrece para cambiar sus elementos si queremos probar opciones diferentes. Tanto alfombras, cojines, mantas, etc., pueden utilizarse tanto por separado, como toque de diseño, o en conjunto y crear un espacio de estilo Kilim total.
No hay comentarios:
Publicar un comentario