Un menú exquisito para una velada romántica
Un mirador, una mesa para dos, mantel de lino, plata, cristal... Todo está listo para celebrar San Valentín. El romanticismo lo pones tú. Nosotros, los detalles y el menú. Mira todas las ideas y recetas.
En un pequeño mirador, frente a un ventanal con cortinas bordadas en lino marfil, vestimos una mesa redonda solo para dos... La fiesta de San Valentín es la excusa perfecta para que organices una romántica cena en pareja. Pero, en esta ocasión, no solo el menú es importante. Tendrás que crear un ambiente íntimo en toda la casa, cuidando hasta el último detalle. Nosotros hemos comenzado con el recibidor, decorándolo con un gran ramo de rosas antiguas en tonos pastel y candelabros dorados y plateados con la mágica luz de las velas, siempre tan sugerentes.
En la mesa
Para la presentación de la mesa, lo natural y lo femenino en pequeñas dosis siempre triunfa: las mismas rosas en un pequeño bouquet, un bajomantel piedra y un mantel de linoson el punto de partida. Añádeles toques de negro y verdigrís, como los bajoplatos, la tetera, que es también una lámpara, o las cintas de terciopelo, tonos que se repetirán en el resto de la casa. Y no te olvides de los destellos del cristal y de la plata: copas talladas, bandejas de vidrio envejecido, cubiteras de acero...
El menú
El acompañamiento perfecto a este ambiente femenino es un menú ligero y delicado, lleno de pasión. Unos entrantes con vieiras al perfume de trufa sobre unos blinis, y una deliciosa ensalada de cangrejo con aguacate y una arómatica vinagreta japonesa. El plato principal es un crujiente hojaldre de salmón al estilo Wellington con salsa de eneldo y para terminar unos canelés, deliciosos postres con especias, bañados en ron... ¡Simplemente perfecto!
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