En los últimos años, uno de los colores más de moda es el violeta. No es ninguna novedad, ya que es un color atemporal, que ha estado presente prácticamente en muchos momentos de la historia. Gracias a su gran gama de tonalidades, resulta muy versátil, pudiendo decorar cualquier estancia, sea cual sea el estilo de esta.
Foto: Ikea |
Su gradación hacia la luz o la oscuridad, dependiendo de la cantidad de azul y magenta, da como resultado un amplio abanico de tonalidades, pasando del lila al morado. Así, si predomina el color rojo, primarán los tonos malvas, rosáceos y berenjenas, más femeninos, mientras que si el color principal es el azul, obtendremos tonos violetas, más fríos, más masculinos.
Foto: La Oca |
Aún así, el violeta es un color muy versátil, que nos permite múltiples combinaciones con otros colores: si lo mezclamos con colores neutros, como el blanco o el beige, lograremos un ambiente tranquilo y en calma; sin embargo, combinado con colores como el amarillo, crearemos una sensación vibrante y viva, llena de energía.
Foto: Textura |
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