Con la llegada del buen tiempo siempre se nos viene a la cabeza un cambio de aires en casa; las tiendas se llenan de colores pastel y colores vivos, accesorios novedosos, mucho más veraniegos, que hacen que sólo se nos pase por la cabeza cambiar la decoración, pero no siempre hace falta recurrir a la tarjeta, y por eso hoy os queremos dar unas claves para cambiar la decoración de tu casa pero SIN GASTAR NI UN EURO.
1. ¡Enciende las velas!
Como bien sabéis las velas crean un ambiente muy agradable y hogareño, pero hay decidirse a encenderla sin miedo a que se gasten, porque muchas veces tenemos las cosas guardadas o sólo de adorno y en el caso de las velas están para usarlas. Ponlas en el recibidor, el dormitorio, en las mesas de centro, repisas, baldas, en la mesa del comedor o en la terraza.
2. Redecora la mesa de centro
Una pila de libros o revistas, una rodaja de madera o una cesta, y un jarrón de flores son todo lo que necesitas para redorar la mesa y darle un look mucho más elegante y cuidado.
3. Añade alguna planta o flores frescas en algún recipiente de cristal
Hasta las las malas hierbas bien puestas en un tarro de conservas o una botella vacía pueden quedar bonitas! =)Reutiliza botes, botellas o diferentes jarrones que tengas olvidados. ¡Se lleva la mezcla de formas y tamaños!
4. Utiliza el sobrante de pintura que te haya quedado de otras ocasiones
Un poco de pintura que tengas de lo que te sobró en alguna ocasión es todo lo que se necesita para pintar un marco de un espejo, unas macetas o algún que otro accesorio. Puedes pintar sólo las patas de una mesa o de las sillas, los bordes de los marcos, el interior de una bandeja o la parte inferior de un florero.
1. ¡Enciende las velas!
Como bien sabéis las velas crean un ambiente muy agradable y hogareño, pero hay decidirse a encenderla sin miedo a que se gasten, porque muchas veces tenemos las cosas guardadas o sólo de adorno y en el caso de las velas están para usarlas. Ponlas en el recibidor, el dormitorio, en las mesas de centro, repisas, baldas, en la mesa del comedor o en la terraza.
2. Redecora la mesa de centro
Una pila de libros o revistas, una rodaja de madera o una cesta, y un jarrón de flores son todo lo que necesitas para redorar la mesa y darle un look mucho más elegante y cuidado.
3. Añade alguna planta o flores frescas en algún recipiente de cristal
Hasta las las malas hierbas bien puestas en un tarro de conservas o una botella vacía pueden quedar bonitas! =)Reutiliza botes, botellas o diferentes jarrones que tengas olvidados. ¡Se lleva la mezcla de formas y tamaños!
4. Utiliza el sobrante de pintura que te haya quedado de otras ocasiones
Un poco de pintura que tengas de lo que te sobró en alguna ocasión es todo lo que se necesita para pintar un marco de un espejo, unas macetas o algún que otro accesorio. Puedes pintar sólo las patas de una mesa o de las sillas, los bordes de los marcos, el interior de una bandeja o la parte inferior de un florero.
5. Intercambia fotos en los marcos que ya tienes
Una manera fácil de darle a cualquier habitación un aspecto fresco y renovado es simplemente introduciendo nuevas fotos o ilustraciones en la pared. Combina fotos antiguas en blanco y negro, fotos familiares, fotos de un viaje reciente o algo completamente diferente, como algunas tarjetas postales.
6. Regala
A veces lo único que se necesita en una estancia es eliminar cosas superfluas para tener más sensación de espacio. Escoge algunos objetos que ya no te digan nada y regálalos a alguien que los necesite.
7. Mueve los muebles de sitio
Mueve las estanterías, algún aparador, cambia las sillas y atrévete a mezclarlas, pon alguna mesa auxiliar como mesita de noche o, más fácil todavía, cambia las lámparas de habitación y las alfombras de sitio y sorprendente del resultado. ¡Seguro que te resulta un ambiente mucho más fresco!
8. Usa recipientes de cocina como organizadores de lujo
Tazas, teteras, botes de cristal, platos de postre y bandejas pueden reutilizarse como floreros, para guardar pinturas, para dejar llaves en el recibidor o para dejar los complementos (pendientes, anillos, collares?), al final del día al lado de la cama; incluso puedes utilizar estas cosas para organizar tu estudio o zona de trabajo.
9. Invitar a amigos
Pasar tiempo con la familia y los amigos es una gran manera de hacer que la casa se sienta más acogedora. No te preocupe si las cosas no estan perfectas... ¡¡¡Un espíritu de bienvenida es mucho más importante!!!
10. Organiza tus libros por colores
Si alguna vez has estado tentado de ordenar los libros por colores, ¡inténtalo! No tienes por qué hacer toda una estantería, basta con probar con algunas baldas y ver si te gusta el efecto.
11. Reutilizar textiles viejos para hacer otros nuevos
Sacos de arpillera viejos, suéteres, tela sobrantes de otros proyectos, o incluso los viejos pantalones vaqueros azules. A todo se le puede dar un segundo uso. ¿Esa manta o mantel precioso que tristemente se manchó y que no tiene arreglo? Prueba a hacer algún cojín y combina texturas, colores y acabados.
12. Saca tus muebles de interior al aire libre -o viceversa-
Una terraza cubierto ofrece mucha protección para cierto tipo de muebles hechos de metal, de madera maciza, de mimbre o ratán, sobre todo si el intercambio es sólo temporal. Del mismo modo, casi cualquier tipo de muebles de exterior se puede intercambiar e introducir en alguna habitación interior.
13. Pon música y coge un libro: ¡Disfruta de tu hogar!
Y quien dice un libro, dice una copichuela, un desayuno en la cama, un largo baño de espuma o lo que más os apetezca, la idea es crear un ambiente relajado, distendido y, sobre todo... ¡¡¡disfrutar de tu casa!!!
¿Utilizáis alguno de estos trucos?
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