Una manera de dar intensidad y alegría a nuestro hogar es convirtiendo ciertas partes del mobiliario en rincones de la selva amazónica. Los estampados tropicales atraen por las sensaciones tan veraniegas que evocan. La habitación de los niños, el salón o incluso el baño pueden empapelarse con palmeras y animales exóticos de todo tipo. ¿Te atreves con ellos?
Una forma de incluir esta tendencia es a través de complementos que no se noten mucho pero que den ese punto fresco que marca la diferencia. Los cojines que tenemos en cualquier sofá de la casa pueden ser una buena base, sobre todo, si contrastan con tonos más claros, puesto que así se favorece la luminosidad en el espacio.
El cuarto de baño también es un buen sitio para dar un toque algo salvaje a la estancia. Recuerda que los límites solo los pones tú y tu imaginación. Las toallas o la cortina de ducha son los escenarios favoritos para este cambio si no quieres que se sature mucho el ambiente.
Si te acecha la indecisión de vez en cuando, siempre puedes añadir ornamentos de este estilo que permitan ser usados o no según el día sin gastar mucho tiempo. Por ejemplo, la utilización de manteles, servilletas o incluso vajillas de este estilo dan mucha flexibilidad creativa.
Por otro lado, los dibujos de vegetación con aves pueden servir de incentivo decorativo para el dormitorio. Ponlo en edredones, lamparitas de noche o cabeceros para dormir plácidamente en un entorno de inspiración natural. Seguro que despiertas con energías renovadas.
Lo tropical es sinónimo de vegetación, y esta no solo debe estar presente en los textiles o papeles pintados, sino que en esta atmósfera resulta de lo más oportuno incluir plantas de interior. De este modo, conseguirás una armonía temática plena, algo que está muy de moda.
Una forma estupenda de acompañar estos tejidos llenos de vida es combinarlos con muebles y piezas de decoración que también beban de materiales naturales. Las cortinas de este salón hacen muy buenas migas con las butacas de mimbre, el zócalo de bambú y los espejos, ¿no te parece?
Aunque el interior de la casa recibe de buen grado estos estampados, en el exterior es donde lo tropical es capaz de alcanzar su mayor esplendor. Imagínate un rincón como este en tu jardín con una cama llena de cojines y varias hamacas de colores en las que echarse una merecida siesta.
Los flamencos siguen causando sensación en el ámbito de la decoración del hogar. Quedan bien en cualquier lugar de la casa, incluso, en la zona dedicada a oficina. En este despacho, pequeñas siluetas rosas de este afamado pájaro salpican una de las paredes. Además, son adhesivos que pueden ser retirados si algún día te cansas.
A los niños les encantan los animales. Películas como 'El rey león' o 'El libro de la selva' les ayudan a empatizar desde muy pequeños con la naturaleza y sus protagonistas. Un papel pintado como este les enseñará a identificar figuras con nombres como papagayo, mono, perezoso o tucán.
¿Te ha convencido? ¿En qué parte de la casa lo pondrías?