En Navidad, la mesa es el gran punto de encuentro no solo de degustaciones, sino de emociones que se convertirán en recuerdos. Haz que tu mesa del 2017 sea diferente a todos los anteriores y que no la olvide ninguno de los invitados. ¿Qué estilo vas a elegir?
NATURALEZA INVERNAL
Esta es mi apuesta, natural, económica y encantadora a rabiar. Lo tengo ya todo pensado (podéis usar la foto de entrada como inspiración). Pocos días antes de las fiestas voy a irme a la sierra que y me voy a poner a recoger elementos naturales para la mesa: ramas de pino, piñas, acebo (puedo podar un poco el que tengo en casa) y ramas de romero y otras hierbas aromáticas que encuentre. Estas tienen que estar frescas para la fiesta, para que aporten olor y queden bonitas, además pienso poner anís estrellado y canela. Como bandejas, ya tengo estudiado dónde voy a comprar esas piezas de madera de pino circular que se llevan tanto, y que son el tronco del pino en cuestión cortado con un dedo y medio de grosor.
BLANCA NAVIDAD CHIC
Blanco y dorado o blanco y plata, tú eliges. El mantel ha de ser blanco (con detalles, si quieres), y los bajo platos del color metalizado que elijas, aunque en realidad también puedes mezclar ambos. La vajilla puede ser blanca lisa, con brocados o con relieves en blanco, y las servilletas deberían ir (idealmente) en el código de color triple: blanco, plata y oro. Puedes poner luces led por la mesa y/o algún portavelas con velas blancas o grises. Si quieres rebajar un poco el tono “chic”, pon alguna piña o un centro de mesa con elementos naturales o que los evoquen, como los pinos cónicos rellenos de bolas que ves en la foto.
NAVIDAD EN ROJO Y ORO
Una opción tradicional o no tanto, según como la complementes. Como base, un bonito mantel blanco de hilo, sobre el que colocaremos bajoplatos en rojo metalizado (no son caros y los encontrarás en cualquier tienda). Sobre ellos, pon tu vajilla lisa blanca o una estampada con detalles rojos y verdes. Tu juego de copas de siempre quedará más navideño si sustituyes la de agua por una gran copa roja. De la cubertería no te preocupes, que sea plateada. Pero el resto de los toques metalizados, llévalos a oro. Prepara un centro con velas, piñas y cintas doradas, combinadas con bolas y adornos rojos. ¡O incluso con manzanas rojas! El efecto será lujoso, original y cálido a la vez. Y si quieres un toque verde distribuye ramitas de abeto o por la mesa o sobre las servilletas. El efecto será aún más navideño.
INSPIRACIÓN NÓRDICA
Nadie como los nórdicos para teatralizar la Navidad, creando ambientes cálidos inspirados en la naturaleza. Si celebras las fiestas en el campo o si tienes una gran mesa de madera, éste es tu estilo. Deja que la veta natural de la mesa sea la gran protagonista, colocando los servicios directamente en bajoplatos o manteles individuales. La vajilla puede ser de papel (te sorprenderán los diseños que hay de usar y tirar, tanto en vajillas como en cuberterías…) y también las servilletas. En el centro, un jarrón de cristal con agua y unas ramas de hiedra o poto, y para hacer un guiño a Papá Noel, algunas figuritas de renos.
UN TOQUE GÓTICO
Si hay algo que contraste totalmente con el dorado… es el negro. Espera, no te asustes, ¡queda genial! Y no… no va a parecer una mesa de Halloween. Sabemos que es una propuesta arriesgada, pero es muy especial y va muy en línea con las bandejas de pizarra, las técnicas de cocina modernas y las tapas más chic.
Sea cual sea el estilo que escojas, ni se te ocurra enfadarte (ni siquiera preocuparte) si algún comensal derrama una gota de cava o una copa de vino en el mantel. Si se mancha… ¡qué se manche! Tú disfruta, que aquí te dejamos los mejores consejos para que tu mantelería quede deslumbrante tras una noche de festejos.